Esta berlina, a caballo entre los segmentos B y C, recibe su primer lavado de cara. Cambia ligeramente tanto por dentro como por fuera, aunque mantiene inalterada su habitabilidad y su buen maletero de 506 litros.
Por fuera, los mayores cambios. En el frontal vemos un nuevo paragolpes, nuevos faros más grandes, nuevos antinieblas y se incorporan las luces diurnas con tecnología led. El logotipo de la marca se une ahora con los faros a través de dos tiras cromadas que intentan aumentar la sensación de anchura del vehículo.
En la trasera, los pilotos se reorganizan en su interior, ofreciendo un nuevo efecto 3D y una nueva firma luminosa. Dos nuevos modelos de llantas de aleación de 16 pulgadas y dos nuevos colores para la carrocería (Azul Lazuli y Gris Acero) completan las novedades exteriores.
En el interior, cambia la consola central, adoptando una nueva pantalla táctil de 7 pulgadas y la posibilidad de conectar el smartphone vía Android Auto y Apple CarPlay. Además, en esta pantalla se ven las imágenes de la nueva cámara de visión trasera. Por último, en la instrumentación aparece un nuevo panel en blanco y negro entre las dos esferas principales en los acabados superiores.
Las motorizaciones no cambian. Seguirá ofreciéndose con dos motores de gasolina (PureTech 82 y VTi 115, este último con cambio manual o automático ETG6) y uno diésel (BlueHDi 100).
Se fabricará en Vigo, como el modelo actual, y se pondrá a la venta durante el primer cuatrimestre de 2016. Ya lleva vendidas más de 400000 unidades (buena parte de ellas en China), lo cual es muy buena cifra, ayudada quizá por los éxitos del modelo en el campeonato WTCC. Es un modelo correcto pero sin muchas pretensiones, aunque suficiente para conductores tranquilos que necesiten mucho espacio, y ahora que por fin han puesto unos reposacabezas traseros de verdad (o eso parece verse en el vídeo), ya con unas plazas traseras en condiciones.
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