Para celebrar el lanzamiento del modelo, Toyota ha creado una edición especial llamada "Launch Edition", limitada a 200 unidades (que ya están vendidas, a 29000 euros cada una). Además, este modelo puede verse en el centro gastronómico Platea Madrid, junto a la Plaza de Colón, hasta el próximo 20 de noviembre.
En este espacio "pop-up" podemos ver el modelo, toquetearlo por fuera y por dentro, y tener una experiencia audiovisual muy interesante ya que podemos ponernos unos auriculares y ver una presentación espectacular con efectos luminosos sobre la carrocería del coche.
Del coche, decir que es más bonito y espectacular en persona que en fotos. Por fuera tiene un diseño espectacular, lleno de líneas de tensión, unos grandes faros delanteros y unos pilotos con forma de bumerán. Los cristales pequeños ayudan a crear una imagen poderosa, y el tirador de la puerta trasera escondido en el montante C junto a la gran caída de la luneta trasera hacen creer que llevamos un coupé. Además, los detalles de esta versión "Launch Edition" ayudan a que sea más llamativo: carrocería bicolor con techo negro, llantas de aleación en "Negro Mate", logotipos de la versión y moldura lateral en "Gris Diamante". Incorpora además los curiosos y poco frecuentes intermitentes secuenciales.
Por dentro, esta versión se distingue por la chapa numerada y la tapicería de cuero con pespuntes en azul, mismo color que se emplea en parte del salpicadero. Los materiales y los ajustes parecen buenos (incluso en zonas que están menos a la vista). Además, la pantalla táctil es de gran tamaño y responde bien a la presión de los dedos, aunque algunos menús no terminen de ser del todo intuitivos (¡y ese reloj digital noventero, ayyy!). El equipo de sonido es de la marca JBL y suena realmente bien. La postura de conducción se consigue fácilmente (aunque el respaldo se regule por palanca), y hay espacio más que de sobra para tallas grandes, aunque no lo parezca al ir un poco encajonado y tener tan poco cristal. Eso sí, la visibilidad es reducida por el mismo motivo.
Detrás, más de lo mismo; hay espacio suficiente aunque ya no destaca tanto (unos cuantos rivales le adelantan en espacio hasta el techo y, sobre todo, para las rodillas), y la forma del cristal hace que junto a nuestra cabeza haya un trozo de plástico que no nos deja ver mucho, ¡el diseño es así! El maletero también es bastante grande, y tiene varias soluciones para organizar la carga como un doble fondo o varios ganchos.
El motor es el mismo del Prius, ya que esta edición especial de lanzamiento estaba disponible únicamente en versión híbrida, formada por un 1.8 de gasolina y un motor eléctrico que conjuntamente entregan 122 CV.
El modelo me ha gustado bastante, ahora sólo falta probarlo para ver cómo va (lo único que no me gusta es que los pilotos se parezcan a los que utiliza Honda... y el nombre del modelo también parezca de Honda). Eso sí, esta versión ya no puede reservarse y habrá que esperar a finales de año a que Toyota comercialice el resto de versiones.
El resto de las fotos, aquí.
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