Aprovechando el viaje a Alemania y Austria que te estoy contando durante estos días fui a visitar el museo de BMW.
Está situado en las afueras de la ciudad de Múnich, en la parte norte. La dirección es Am Olimpiapark 1 (efectivamente, en la zona olímpica, recuerda que München fue sede de los Juegos Olímpicos de 1972). Se puede ir:
- En coche. Sin problemas porque allí hay aparcamiento (pagando, claro)
- En bici desde el centro de la ciudad, ya que es llano y no está tan lejos, además allí mucha gente se mueve en bicicleta y no hay ningún problema, la ciudad está adaptada y los conductores están acostumbrados.
- En transporte público, para lo que puedes coger el U-Bahn (como nuestro metro), línea U3, parada Olimpiazentrum; o bien los autobuses líneas 173 o 180, que te dejan en la puerta. Las líneas de bus 177 y 178 y el Tram 27 también paran cerca.
El complejo consta de tres partes: la fábrica (que se puede visitar previa cita, no lo conseguí por problemas de fechas), el museo propiamente dicho, y el BMW Welt (que es un gran edificio con la gama actual y tiendas, así como un concesionario pero en grande y moderno). Toda la información la tienes en su página web, aquí (en inglés o en alemán).
La visita al BMW Welt es gratuita, y su horario es de 7:30 a 24 horas de lunes a sábado, y de 9 a 24 horas los domingos (la apertura del edificio, porque las tiendas por ejemplo tienen otro horario mucho más reducido: de 9 a 18 horas de lunes a sábado, y de 10 a 18 horas los domingos). Allí puedes ver buena parte de la gama actual del grupo bávaro (que recuerda que incluye BMW, Mini y Rolls-Royce), aparte de algún clásico, y unas cuantas tiendas con merchandising de las marcas y algunos restaurantes. Por último, también puedes recoger allí tu BMW si así lo indicas al comprarlo.
El BMW Museum está del otro lado de la calle, junto a las oficinas (las famosas cuatro torres cilíndricas); se puede ir de un edificio al otro mediante una gran pasarela que cruza la calle. Los lunes está cerrado (¡ojo!), y de martes a domingo abre de 10 a 18 horas. La entrada general cuesta 10 euros (hay algunas reducciones, mejor consultar a la entrada).
Es una visita imprescindible si eres amante de los coches y estás en la capital bávara. Allí puedes encontrar modelos (de coches y motos) de toda la historia de la marca, agrupados por temas (algunos históricamente, otros por generaciones de modelos, otros por salir en alguna película, otros por ser más importantes...). Es un museo grande y bonito (incluso el edificio en sí tiene una forma bastante curiosa), aunque para mi gusto reguleramente explicado, ya que algunas salas están medio escondidas y es fácil que te dejes algo por ver (no son continuación unas de otras, no hay un recorrido establecido). Y la tienda es pequeña (sobre todo eché de menos que no hubiese más miniaturas).
De todas formas, a pesar de esos pequeños defectillos, recomiendo la visita al 100 %. Y si lo planeas con tiempo y puedes ver la fábrica, ya haces el completo. El resto de las fotos, aquí.
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